Ya estamos en 5.000Kms. La cosa ha ido rápido desde los 4.000. Y hubiera ido más si no fuera por el parón navideño. En cualquier caso, se nota el aumento diario de kilometraje.
Finalmente he aguantado con las cubiertas durante estos meses, aunque ahora sí que he llegado a un punto en que el cambio de la trasera no admite demora. De hecho, ya la tengo comprada y pendiente de instalar cuando tenga un rato libre este fin de semana. Desmontar la rueda trasera de la Brompton no es evidente y mejor hacerlo con tiempo, sobretodo si es la primera vez.
Aunque las Brompton Kevlar me han dado muy buen resultado (no he pinchado ni una sola vez en todo este tiempo), he decidido cambiar de cubiertas y probar con las Schwalbe Marathon (las normales, no las plus). La gente de Cap Problema me convenció y la diferencia de precio con las Brompton Kevlar, aunque no sea el argumento definitivo, no es para tomarla a broma. ¡Las Brompton cuestan un 50% más que las Marathon!
La delantera aún no la cambio. Al ritmo de desgaste que lleva y, salvo reventón accidental o inicio de una racha preocupante de pinchazos, creo que llegaré fácilmente con ella a los 6.000 Kms y posiblemente más. Y para entonces tendré claro también si la Marathon atrás ha valido la pena.
Por lo que parece, los 5.000 ya es una cifra donde empieza a apreciarse el desgaste de los componentes. La cadena ya muestra signos de estiramiento y hay que ir pensando en cambiarla. Quizá aproveche para poner un cierre rápido en la nueva y así limpiarla con más facilidad.
Y como añadido, esta última semana el sensor del cuenta kilómetros ha empezado a fallar. Parece cosa de la pila, aunque tiene una duración estimada de 10.000kms y llevo solo la mitad. De todas formas, casi un año y medio usándose a diario me parece bastante aceptable.
En cualquier caso, como puede verse, nada grave. Todos los "ajustes" necesarios son debidos al desgaste lógico por el uso, por lo que seguimos dentro de la normalidad absoluta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario